Elijo ser

Escribir es como hacer ejercicio, hay que practicarlo para no atrofiarse, para que no se atrofien las ideas, que para un creativo puede resultar peor que atrofiarse un músculo. 

Ahora solo escribo porque me toca, deje de escribir porque me gusta. Ya no sé como acomodar las palabras mas que para decir por qué todo en el laboratorio  me dio mal; ya  no se me ocurren historias, ya no fantaseo despierta.

¿Esto será crecer? Porque de ser así, es una mierda.

Hace unos 6 años me imaginaba mis 21 tan diferentes, y no me malinterpreten no es que mis 21 sean malos, solo que cuando tenia 15 años creía que mi mundo era terrible y que a los 21 todo iba a estar solucionado, y no me culpo, todavía creo que todo debe estar solucionado, el problema es que aún no descifro cómo. Pero trabajo en ello, así como trabajo con todas las cosas que pasan por mi mente, que debo admitir no son pocas, considerando lo fácil que es para mi distraerme. 

Me gusta leer ocasionalmente las cosas que escribía en este blog cuando estaba en el colegio y decía que cuando grande quería ser escritora, ahora seré farmacéutica, pero seré una farmaceútica escritora. Quiero comprometerme a seguir escribiendo, a volver a inventar historias, a volver a ser una romántica intensa, volver a crear historias de amor tontas con finales felices y por qué no, dedicarle a alguna persona uno que otro escrito. 

Por lo pronto, seguiré intentando con todas mis fuerzas buscar inspiración y seguiré leyendo mis antiguos escritos, usted mi querido lector, también debería hacerlo, le prometo que va a distraerse un rato y pues en mi mente no son nada malos.